
Ingredientes:
· 4 tazas de harina
· 1 cucharada de levadura en polvo
· 3 cucharaditas de canela
· 1 cucharadita de jengibre
· 1 taza de mantequilla a temperatura ambiente
· 1 taza de azúcar moreno
· 1 huevo
· Algo menos de una taza de miel
Recetuka hecha en familia, con mi gordis, un día en la cocina... Planazo!!!!
Tomamos como medida una taza, pero he de decir
que no la hemos llenado hasta arriba.
En un bol, tamizamos la harina, la
levadura, el jengibre y la canela.
En otro bol y con ayuda de unas
varillas, mezclamos la mantequilla con el azúcar, hasta que esté totalmente
disuelto. Añadimos la miel y el huevo y batimos. Una vez tengamos
todo bien mezclado, incorporamos el bol de la harina y mezclamos hasta que
quede una mezcla homogénea, si ha quedado demasiado pegajosa, podemos añadir un
poco más de harina, pero no demasiado, si no luego nos quedarán duras.
Envolvemos la masa en papel film y
dejamos en un lugar fresco y seco (en el horno apagado, por ejemplo) durante 3
horas. La última media hora la metemos en la nevera para que después podamos manipular
mejor, ya que la masa está pegajosa.
Extendemos la masa en un papel de
horno y cortamos con las formas de las galletas, si nos cuesta levantar la
forma del papel, podemos meter un poco en la nevera para que endurezca y podamos despegar.
Una vez tengamos las galletas,
llevamos al horno precalentado a 180º unos 6 minutos más o menos (depende
también del grosor con que nos hayan quedado), seguramente estén blandas, pero
no pasa nada, luego irán endureciendo, si las sacamos duras del horno, nos
quedarán como piedras.
¡¡¡Seguro que os gusta!!!